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disticha

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Todo se publica por disticha

  1. ¿Respetar la diferencia de tomarse el poder por las armas si así se le antoja? En lo que a mi se refiere, NONES. Irrespeto.
  2. El drama de navegar por el foro estando a como 18.000 Km de distancia es que uno queda como brasa y con las ganas metidas. Ufff.
  3. Un amigo mío escribió hace un par de días, con mucho tino, me parece: "Ahora en la Alianza están preocupados por la píldora del día después. Antes, RN y UDI protegieron y loaron a un gobierno (militar) que asesinó y torturó embarazadas. No sé que será peor: que una píldora pudiera producir producir aborto (el doctor Horacio Croxatto informaba hace pocos días que definitivamente no lo es, luego de variadas investigaciones), o matar a una mujer y a su feto. Antes justificaron esos crímenes horrendos ; hoy protegen el más leve inicio de germen de la vida...¿quién los entiende?." Yo no, en todo caso. Viva el condón, la píldora contraceptiva y la píldora del día de después, en caso de accidente.
  4. Tiene, mucha razón Toribio, me parece. • Transantiago y autopistas urbanas, mierdal de tacos... corrupción a nivel del MOP e intereses privados que se sobreponen al interés público. • La mugre de educación y los sueldos pésimos de los profesores: incapacidad y falta de voluntad política por parte de la Concertación, incluyendo a la actual presidenta, a pesar de que HAY RECURSOS (¡10.000.millones de dólares de superávit fiscal!) • Contra la cesantía no se les ocurre nada mejor que "mayor flexibilidad" del trabajo, cuando en Chile esa flexibilidad es tán extensible como un chicle (es la más elástica del mundo). • Salud, idem que para la educación (hay recursos que nadie se atreve a gastar, por conformismo y miedo a los gurúes económicos) Aunque todos estos problemas son perfectamente reales, poco tienen que ver con el asunto del modo de escrutinio. Tiendo a pensar sin embargo que si se cambiara el Binominal por un sistema democrático, tal vez un nuevo Congreso, con otras fuerzas, otros equilibrios y otras posibles alianzas entre partidos a propósito de estos problemas, logre cambiar algo. Bueno, claro, esto significa ser muy optimista... Saludos
  5. disticha

    La GENESIS

    Muy bueno, Oda, tanto más que no había detectado ese post histórico.
  6. Estimado Signor Neptuno: Casi TODOS los escrutinios en el primer mundo son directos (exceptuar los senadores en Francia y los presidentes en EEUU, elegidos por "grandes electores"). Y en TODOS los escrutinios europeos (y norteamericanos) se ganan por MAYORIA (simple o absoluta, el punto no está en el detalle, sino en el principio), contrariamente a la regla del Bi-Nominal chilensis, sistema en el cual, para dos escaños, si el que tiene segunda votación no tiene el DOBLE de su contrincante, y anque tenga bastante más votos que él, gana el contrincante. Eso no se ve en NINGUNA parte del (mal llamado) primer mundo (pero igual, bastante + serio en esas materias). Cordiali saluti.
  7. Nop, estimado Neptunius, yo diría que lo que me reprocha le ocurre más bien a su merced, y no es por llevarle la contra. El presidente de Francia, por ejemplo, se elige por voto universal a la mayoría absoluta de votos. Vamos, pues, a un breve resumen de viejas clases de ciencia política. En Francia como en otros países (Alemania, Italia, España, Gran Bretaña, etc.), la designación del primer ministro, jefe de gobierno, depende de la mayoría salida de las urnas. La mayoría se obtiene mediante dos sistemas de escrutinio: mayoritario y proporcional. 1/ El escrutinio mayoritario Es la forma más antigua de designar a representantes políticos. Se trata de atribuir uno (escrutinio uninominal) o varios escaños al que o a los que obtuvieron más votos. Aquí hay tres figuras posibles: (a) El escrutinio uninominal a una sola vuelta (utilizado por ejemplo en Gran Bretaña), en el cual el que tiene la mayoría simple de votos gana el escaño. (b) El escrutinio uninominal a dos vueltas (utilizado por ejemplo en Francia), en el cual se gana la primera vuelta si se obtiene una mayoría absoluta (51%) de los votos. Si no se llega a ella se organiza una segunda vuelta con los dos candidatos que llegaron en primer lugar. Así funcionó, en Chile, la elección presidencial. En Francia se utiliza este método para la presidencial y también para la elecciones legislativas. © El escrutinio plurinominal, a una vuelta o dos, que atribuye a la lista que llegó pimera todos los escaños(así se designan los "grandes electores" para la presidencial norteamericana) o la mayoría de los escaños. 2/ El escrutinio proporcional El principio es simple: se atribuyen los escaños en proporción con los votos obtenidos por cada cual, pero su aplicación es compleja y depende del método que se aplica para repartir los escaños. El método general es el del cociente electoral, que fija un número x de votos para obtener un escaño. Se atribuye luego un número y de escaños a cada lista dividiendo el total de votos de cada lista por el cociente electoral. Lo que quede se reparte siguiendo otras reglas, más o menos complejas (como el sistema llamado "de compensaciones" que se usa en Alemania). Suele ocurrir que según cómo se repartan estos "restos" se favorece a los partidos grandes o a los pequeños. 3. Los escrutinios mixtos Existen por último modos de escrutinio mixtos que traztan de cumular las ventajas de los dos métodos y de limitar sus inconvenientes, pero muy complicados de poner en juego en elecciones importantes. Nada, pues, del otro mundo. Comparen estos sistemas con el bi-nominal. Saludos (y perdón de antemano por lo largo y latoso) :mamba:
  8. Me he quedado con las ganas, y no he tenido la oportunidad, nunca....
  9. Bueno, como no se puede dejar de opinar (por lata que me dé), quiero dejar establecido aquí que, 1) contrariamente a lo que piensan muchos co-foreros, el sistema bi-nominal es perfectamente injusto y no representativo de la votación 2) que Chile no es, desde fines de la colonia, una monarquía ni tampoco una república censitaria (en la que votan sólo los que tienen tal cantidad de recursos o cualquier criterio que se quiera dar para restringir el universo electoral ,como por ejemplo : no hacer votar a las mujeres, a los viejos, a los tontos, a los enemigos...) 3) que en toda república y democracia que se respeta en el primer mundo (donde está estancado Disticha por el momento), las votaciones se deciden por mayoría simple de votos, sin que ello resulte en un caos político ni económico Esto, a título de recordatorio. :diablo:
  10. Felicitaciones a los nuevos moderadores, y que moderen sin moderación, por favor...
  11. Busco, para publicacion en una gran editorial europea, AUTORES/AUTORAS, GUIONISTAS Y DIBUJANTES (todo eso al mismo tiempo o un grupo de personas dispuestas a trabajar juntas) para la creación de Mangas. Obligatoriamente historias que puedan correr por lo menos en cinco volúmenes de unas 150 páginas cada uno. Experiencia: mucha o ninguna, da lo mismo, si el resultado es bueno. Selección a partir de sinopsis Contacto : Disticha
  12. Que los flojos aprendan a usar la lupa. Sierra Bella es un privado ampliamente comentado en el foro. EDITADO POR SEIYA Maestro Disticha, disculpe pero le baje un numerito a la letra... si se que dan rabia estos weones pajeros..
  13. WUUUUAAAAAJJJJJJAAAAAJJJJAAAJAJAJAJAJA. Hacia un buen tiempo que no me entretenía ni me reía tanto como con la lectura de este post toplero. Se les agradece, Mulato y Ravino. Excelentísimos reportes y comentarios. Disticha
  14. Un cuadro plástico en el vocabulario puteril chileno significa dos (o más) señoritas desnudas que se besan, abrazan, acarician, etc. delante de un cliente, antes de ocuparse de él. De dónde viene la expresión es otro asunto. Yo pretendo que de los cuadros vivos muy a la moda a fines del siglo XIX, en que so pretexto de representar con personas vivas un cuadro existente se empelotaban muchachas en los burdeles y ferias.
  15. Oiga XTC, ¿le molestaría escribir en letra más grande? Mire que nadie lo está leyendo, y por lo tanto pierde su tiempo (y el nuestro al hacer algunos esfuerzos). Se agradece de antemano. Disticha (estocador miope)
  16. Para los despistados, apliquen la lupa "Buscar" arriba de la página con el nombre de la Miss, y verán lo que verán.
  17. ¿Y qué será de MononaLaLisa? ¿Dónde estará mi amiga Sexoardiente? (¿Qué se fizo el rey don Juan?...) En realidad, hoy por hoy... hubiera estocado a ... Calienta_sopa... si no hubiera estado embarazada.
  18. JAJAJAJAJAJAJA, muy bueno... Lo he leído por lo menos tres veces, en ocasiones distintas, y me sigo riendo. JAJAJAJA. Buen aporte, camarada Rookie.
  19. Barbara pues amigo, si con ella se inicio este thread, además que el padawan este replico todos las evaluaciones hechas por CC a ella, no son notas que el halla puesto ... fijese que todo lo que esta al principio de su post es un extracto de lo que escribió CC en el primer posteo del thread JAJAJAJA... Puchas que son flojos...
  20. ¿Chuuu y este padawan de donde salio? :shock: Viene recién llegando al foro y llega y critica una evaluación ... y no se porque me late que ni siquiera a visto a la chica en cuestión!! :evil: Por cierto, ¿y cuál sería la chica en cuestion?
  21. A propósito de este asunto, recuerdo este extraordinario cuento de Jorge Luis Borges: Tres versiones de Judas (Artificios, 1944; Ficciones, 1944) There seemed a certainity in degradation. T. E. Lawrence: Seven Pillars of Wisdom, ciii En el Asia Menor o en Alejandría, en el segundo siglo de nuestra fe, cuando Basílides publicaba que el cosmos era una temeraria o malvada improvisación de ángeles deficientes, Niels Runeberg hubiera dirigido, con singular pasión intelectual, uno de los coventículos gnósticos. Dante le hubiera detinado, tal vez, un sepulcro de fuego; su nombre aumentaría los catálogos de heresiarcas menores, entre Satornilo y Carpócrates; algún fragmento de su prédicas, exonerado de injurias, perduraría en el apócrifo Liber adversus omnes haereses o habría perecido cuando el incendio de una bibilioteca monástica devoró el último ejemplar del Syntagma. En cambio, Dios le deparó el siglo veinte y la ciudad universitaria de Lund. Ahí, en 1904, publicó la primera edición de Kristus och Judas; ahí, en 1909, su libro capital Den hemlige Frälsaren. (Del último hay versión alemana, ejecutada en 1912 por Emili Schering; se llama Der heimliche Heiland.) Antes de ensayar un examen de los precitados trabajos, urge repetir que Nils Runeberg, miembro de la Unión Evangélica Nacional, era hondamente religioso. En un cenáculo de París o aun en Buenos Aires, un literato podría muy bien redescubir las tesis de Runeberg; esas tesis, propuestas en un cenáculo, serían ligeros ejercicios inútiles de la negligencia o de la blasfemia. Para Runeberg, fueron la clave que descifra un misterio central de la teología; fueron materia de meditación y análisis, de controversia histórica y filológica, de soberbia, de júbilo y de terror. Justificaron y desbarataron su vida. Quienes recorran este artículo, deben asimismo considerar que no registra sino las conclusiones de Runeberg, no su dialéctica y sus pruebas. Alguien observará que la conclusión precedió sin duda a las “pruebasâ€. ¿Quién se resigna a buscar pruebas de algo no creído por él o cuya prédica no le importa? La primera edición de Kristus och Judas lleva este categórico epígrafe, cuyo sentido, años después, monstruosamente dilataría el propio Nils Runeberg: No una cosa, todas las cosas que la tradición atribuye a Judas Iscariote son falsas (De Quincey, 1857). Precedido por algún alemán, De Quincey especuló que Judas entregó a Jesucristo para forzarlo a declarar su divinidad y a encender una vasta rebelión contra el yugo de Roma; Runeberg sugiere una vindicación de índole metafísica. Hábilmente, empieza por destacar la superfluidad del acto de Judas. Observa (como Robertson) que para identificar a un maestro que diariamente predicaba en la sinagoga y que obraba milagros ante concursos de miles de hombres, no se requiere la traición de un apostol. Ello, sin embargo, ocurrió. Suponer un error en la Escritura es intolerable; no menos tolerable es admitir un hecho casual en el más precioso acontecimiento de la historia del mundo. Ergo, la trición de Judas no fue casual; fue un hecho prefijado que tiene su lugar misterioso en la economía de la redención. Prosigue Runeberg: El Verbo, cuando fue hecho carne, pasó de la ubicuidad al espacio, de la eternidad a la historia, de la dicha sin límites a la mutación y a la carne; para corresponder a tal sacrificio, era necesario que un hombre, en representación de todos los hombres, hiciera un sacrificio condigno. Judas Iscariote fye ese hombre. Judas, único entre los apóstoles intuyó la secreta divinidad y el terrible propósito de Jesus. El Verbo se había rebajado a mortal; Judas, discípulo del Verbo, podía rebajarse a delator (el peor delito que la infamia soporta) y ser huésped del fuego que no se apaga. El orden inferior es un espejo del orden superior; las formas de la tierra corresponden a las formas del cielo; las manchas de la piel son un mapa de las incorruptibles constelaciones; Judas refleja de algún modo a Jesús. De ahí los treinta dineros y el beso; de ahí la muerte voluntaria, para merecer aun más la Reprobación. Así dilucidó Nils Runeberg el enigma de Judas. Los teólogos de todas las confesiones lo refutaron. Lars Peter Engström lo acusó de ignorar, o de preterir, la unión hipostática; Axel Borelius, de renovar la herejía de los docetas, que negaron la humanidad de Jesus; el acerado obispo de Lund, de contradecir el tercer versículo del capítulo 22 del Evangelio de San Lucas. Estos variados anatemas influyeron en Runeberg, que parcialmente reescribió el reprobado libro y modificó su doctrina. Abandonó a sus adversarios el terreno teológico y propuso oblicuas razones de orden moral. Admitió que Jesús, «que disponía de los considerables recursos que la Omnipotencia puede ofrecer», no necesitaba de un hombre para redimir a todos los hombres. Rebatió, luego, a quienes afirman que nada sabemos del inexplicable traidor; sabemos, dijo, que fue uno de los apóstoles, uno de los elegidos para anunciar el reino de los cielos, para sanar enfermos, para limpiar leprosos, para resucitar muertos y para echar fuera demonios (Mateo 10: 7_8; Lucas 9: 1). Un varón a quien ha distinguido así el Redentor merece de nosotros la mejor interpretación de sus actos. Imputar su crimen a la codicia (como lo han hecho algunos, alegando a Juan 12: 6) es resignarse al móvil más torpe. Nils Runeberg propone el móvil contrario: un hiperbólico y hasta ilimitado ascetismo. El asceta, para mayor gloria de Dios, envilece y mortifica la carne; Judas hizo lo propio con el espíritu. Renunció al honor, al bien, a la paz, al reino de los cielos, como otros, menos heroicamente, al placer.[1] Premeditó con lucidez terrible sus culpas. En el adulterio suelen participar la ternura y la abnegación; en el homicidio, el coraje; en las profanaciones y la blasfemia, cierto fulgor satánico. Judas eligió aquellas culpas no visitadas por ninguna virtud: el abuso de confianza (Juan 12: 6) y la delación. Obró con gigantesca humildad, se creyó indigno de ser bueno. Pablo ha escrito: El que se gloria, gloríese en el Señor (I Corintios 1: 31); Judas buscó el Infierno, porque la dicha del Señor le bastaba. Pensó que la felicidad, como el bien, es un atributo divino y que no deben usurparlo los hombres.[2] Muchos han descubierto, post factum, que en los justificables comienzos de Runeberg está su extravagante fin y que Den hemlige Frälsaren es una mera perversión o exasperación de Kristus och Judas. A fines de 1907, Runeberg terminó y revisó el texto manuscrito; casi dos años transcurrieron sin que lo entregara a la imprenta. En octubre de 1909, el libro apareció con un prólogo (tibio hasta lo enigmático) del hebraísta dinamarqués Erik Erfjord y con este pérfido epígrafe: En el mundo estaba y el mundo fue hecho por él, y el mundo no lo conoció (Juan 1: 10). El argumento general no es complejo, si bien la conclusión es monstruosa. Dios, arguye Nils Runeberg, se rebajó a ser hombre para la redención del género humano; cabe conjeturar que fue perfecto el sacrificio obrado por él, no invalidado o atenuado por omisiones. Limitar lo que padeció a la agonía de una tarde en la cruz es blasfematorio.[3] Afirmar que fue hombre y que fue incapaz de pecado encierra contradicción; los atributos de impeccabilitas y de humanitas no son compatibles. Kemnitz admite que el Redentor pudo sentir fatiga, frío, turbación, hambre y sed; también cabe admitir que pudo pecar y perderse. El famoso texto Brotará como raíz de tierra sedienta; no hay buen parecer en él, ni hermosura; despreciado y el último de los hombres; varón de dolores, experimentado en quebrantos (Isaías 53: 2_3), es para muchos una previsión del crucificado, en la hora de su muerte; para algunos (verbigracia, Hans Lassen Martensen), una refutación de la hermosura que el consenso vulgar atribuye a Cristo; para Runeberg, la puntual profecía no de un momento sino de todo el atroz porvenir, en el tiempo y en la eternidad, del Verbo hecho carne. Dios totalmente se hizo hombre hasta la infamia, hombre hasta la reprobación y el abismo. Para salvarnos, pudo elegir cualquiera de los destinos que traman la perpleja red de la historia; pudo ser Alejandro o Pitágoras o Rurik o Jesús; eligió un ínfimo destino: fue judas. En vano propusieron esa revelación las librerías de Estocolmo y de Lund. Los incrédulos la consideraron, a priori, un insípido y laborioso juego teológico; los teólogos la desdeñaron. Runeberg intuyó en esa indiferencia ecuménica una casi milagrosa confirmación. Dios ordenaba esa indiferencia; Dios no quería que se propalara en la tierra Su terrible secreto. Runeberg comprendió que no era llegada la hora: Sintió que estaban convergiendo sobre él antiguas maldiciones divinas; recordó a Elías y a Moisés, ,que en la montaña se taparon la cara para no ver a Dios; a Isaías, que se aterró cuando sus ojos vieron a Aquel cuya gloria llena la tierra; a Saúl, cuyos ojos quedaron ciegos en el camino de Damasco; al rabino Simeón ben Azaí, que vio el Paraíso y murió; al famoso hechicero Juan de Viterbo, que enloqueció cuando pudo ver a la Trinidad; a los Midrashim, que abominan de los impíos que pronuncian el Shem Hamephorash, el Secreto Nombre de Dios. ¿No era él, acaso, culpable de ese crimen oscuro? ¿No sería ésa la blasfemia contra el Espíritu, la que no será perdonada (Mateo 12: 31)? Valerio Sorano murió por haber divulgado el oculto nombre de Roma; ¿qué infinito castigo sería el suyo, por haber descubierto y divulgado el horrible nombre de Dios? Ebrio de insomnio y de vertiginosa dialéctica, Nils Runeberg erró por las calles de Malmö, rogando a voces que le fuera deparada la gracia de compartir con el Redentor el Infierno. Murió de la rotura de un aneurisma, el primero de marzo de 1912. Los heresiólogos tal vez lo recordarán; agregó al concepto del Hijo, que parecía agotado, las complejidades del mal y del infortunio. NOTAS [1] Borelius interroga con burla: ¿Por qué no renunció a renunciar? ¿Porqué no a renunciar a renunciar?. [2] Euclydes da Cunha, en un libro ignorado por Runeberg, anota que para el heresiarca de Canudos, Antonio Conselheiro, la virtud «era una casi impiedad». El lector argentino recordará pasajes análogos en la obra de Almafuerte. Runeberg publicó, en la hoja simbólica Sju insegel, un asiduo poema descriptivo, El agua secreta; las primeras estrofas narran los hechos de un tumultuoso día; las úttimas, el hallazgo de un estanque glacial; el poeta sugiere que la perduración de esa agua silenciosa corrige nuestra inútil violencia y de algún modo la permite y la absuelve. El poema concluye así: El agua de la selva es feliz; podemos ser malvados y dolorosos. [3] _Maurice Abramowicz observa: “Jésus, d'aprés ce scandinave, a toujours le beau rôle; ses déboires, grâce à la science des typographes, jouissent d'une réputabon polyglotte; sa résidence de trente_trois ans parmi les humains ne fut en somme, qu'une villégiatureâ€. Erfjord, en el tercer apéndice de la Christelige Dogmatik refuta ese pasaje. Anota que la crucifixión de Dios no ha cesado, porque lo acontecido una sola vez en el tiempo se repite sin tregua en la eternidad. Judas, ahora, sigue cobrando las monedas de plata; sigue besando a Jesucristo; sigue arrojando las monedas de plata en el templo; sigue anudando el lazo de la cuerda en el campo de sangre. (Erlord, para justificar esa afirmación, invoca el último capítulo del primer tomo de la Vindicación de la eternidad, de Jaromir Hladík).
  22. Felicitaciones por su tabla, colega Dunga. Conozco a Nicol y sé de qué habla. Confirmo todo lo expresado por usted. Siga posteando.
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