Años ha, un buen amigo hiper pituco y conocido jurisconsulto de la plaza, rey del hueveo y aficionado a convencer y presentar escorts y cafetinas, se empota con una de ellas, cosa que por supuesto seria transitoria.
Los amigos le bromeabamos.
Y?? Como anda la p... ¡Bien, le doy como caja!.
Y?? Dile a la p....tita, que se presente una amiga.¡ Le voy a decir..! Y las presentaba.
Oye, es rica la p...tita pero mas ordinaria que la cresta. Si, pero en la cama es una bala. Etc. Etc.
Oye, que ricas tetas tiene la p...ta, pásala de vez en cuando.
P..ta, para arriba, p..tita para abajo por un par de meses.
Hay que reconocer, que la mina era exquisita y simpatiquisima, y nadie pensó que duraria.
Hoy cuando la miro, las cosas que dijimos de ella delante de mi amigo en esos primeros meses, me hacen ponerme rojo todavía hoy despues de 15 años y con los tres hijos que tienen, uno de los cuales es mi muy querido ahijado.
Moraleja. Un prudente silencio, a veces evita momentos muy embarazosos en el futuro.
Saludos.
Martingalas.