Cuando viví en la quinta región me estuve comiendo una minita de Villa Alemana, esta pérfida me invitó a conocer la quinta vergara y como era más aweonao que lo que soy ahora no me dí cuenta de sus intenciones sino que hasta que me dijo:" aquí es donde vienen las parejas a pololear..." de una la tenía medio empelotas y le estábamos dando...
La adrenalina a full, según yo por 2 razones, la posibilidad de que te pillen (pudor hipócrita) y la excitación de saber que la calentura le ganaba a lo señorita que puede ser una mina, un polvo para recordar.
La otra ocasión fue cuando otra mina me invitó a "conocer" un mirador en su auto, ella manejando, y cuando llegamos no le encontré ningún brillo al lugar hasta que solita empezó a dirigirse al país, en plena muy jugosa faena empieza a acercarse un wea y le digo a la mina:"viene alguien", suelta al tonto, se asoma y me dice :"no importa viene lejos...", más calentura por su reacción, ese fue uno de los orales más disfrutados de mi vida como guinda de la torta lo dejó limpiecito y me dice:"no se perdió ni una gotita...mmmm"
Si, al aire libre tiene su gracia pero de día y que ella lo sugiera, no tiene precio.
Salud!