Concuerdo con Rocazo un acto no consentido y en la vía pública es ofensivo y degenerado, si más encima el abusador se saca la poronga es digno de recibir una pateadura.
Conocí una escort que le paso algo similar en el metro, un tipo se quedó pegado punteandola, quedó congelada en el sitio, menos mal que fue auxiliada por otros hombres que estaban en el lugar y al sujeto lo bajaron a patadas mientras ella estaba en un ataque de llanto.... como ven aunque sea escort sigue siendo una mujer con toda su fragilidad... que tanto nos gusta,
Salu2