Lo tenía bien guardado y hasta ahora nadie le había contado a nadie, pero el tema lo amerita.
El año pasado en una visita a Paraíso Morandé me ocurrió una experiencia inesperada con Debora la peruana, demás decir lo rica que es la pendeja. El asunto es que esa tarde de sol el antro estaba repleto y el único lugar que encontré menos lleno fue el sector de las bancas, ahí estaba ella... moviendo sus caderas y jugueteando con su pelo. A esta se lo pongo me dije, la miré, se acercó, frotó su rico culo contra mi cierre y fuimos al baño sólo.
Y aquí viene lo bueno. La mina super arisca, no me dejaba que le tocara el pelo, que la apretara mucho y esas weas cuando las minas se ponen y/o son weonas (para que decir que hubo besos). La correspondiente funda al cabezón y comienza con el mamón de rigor, nada de otro mundo, termina de chuparlo y la pongo de pie mirando a la pared (castigada por arisca) y comencé ctm... dele huasca con la cabrita esta, dele que dele y a la vez aguantando no irme porque la escena era memorable y es que es muy rica la Deborita. Luego de unos 8-10 minutos en la misma escena sucumbí ante el placer y vi la luz y comencé a darle con mas fuerza y en eso que estaba eyaculando siento que la mina se sale del estoke y deja caer de entre sus piernas una gran cantidad de líquido que a su vez deja una gran poza que hasta mis zapatillas quedaron empapadas. La mina se urgió caleta, me miró y me dijo "es la segunda vez que me pasa esto" y yo... waah que onda? en ese momento no cachaba que wea, había visto squirt en las puras porno y ni a mi polola en todos estos años y tampoco a las canas al aire (lado A y B) les había yo provocado un squirt.
Me vestí y salí mas mas contento que la cresta, pensaba que iba a abrir la puerta y todos los colegas estokeriles me iban a aplaudir por tal extraña y satisfactoria hazaña.
En fin es una linda historia para contarles a mis nietos.