Nunca voy a este tipo de cafe, pero quede gratamente sorprendido con una pendeja que trabaja ahi, Evelyn, 19 años, muy alta tremendas callawuawuas y un tambor , ufff, linda de cara, que mas pedir, si sólo es una pendeja. Hay una colombiana Rubia exquisita , muy simpática y con el tremendo forro.
Lo malo, el local fue vendido tengo entendido , asi que no se sabe si va a continuar en este giro.