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Blade Runner

Moneyball (2011)

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El beisbol es un deporte enraizado profundamente en USA. La Liga Profesional MLB gasta millones de dolares que en comparacion dejan a la NBA, la NFL y la NHL como parientes menores del deporte en ese lado del mundo.

En ese orden de cosas, Billy Beane (un creible Brad Pitt) gerente general de los Atleticos de Oakland ve como sus mejores jugadores emigran hacia los clubes con mejores recursos. Su planilla de menos de 40 millones no puede competir con las de mas de 140 millones como la de los Yankees. Colocado en un trance de reconstruir su equipo, opta por romper las reglas. Deja de lado a su red de cazatalentos, opta por escuchar a un analista de economia de Yale (un sorprendente Jonah Hill) y reemplaza intuicion por estadisticas. Contrata un puñado de jugadores echados de otros equipos y en decadencia para ver si, una vez más, puede conducir a sus Atleticos hasta el ultimo partido.

El filme transcurre bien principalmente porque impulsa al espectador a sentir simpatias por el personaje de Billy Beane. Porque Beane lucha no solo por su integridad o por la del deporte. Lucha contra toda una estructura que convierte a los equipos chicos en "donante de organos" para los poderosos y contra todos los intereses generados y que hay en medio del juego.

Brad Pitt y Jonah Hill cumplen con sus roles, llevando el peso de la pelicula. El principal defecto, sin embargo, no es precisamente un tema cinefilo. Al tratar el tema del besibol hace que un espectador 100% chileno le pierda un grado de interes. Es como si en Texas un camionero escuchara cuecas. Lo bueno, es que al ver el tema del dinero tan involucrado hoy en dia al deporte (en nuestro caso, el futbol) permite hacer una especie de paralelos con nuestra realidad.

Billy Beane sigue siendo hoy en dia Gerente General de los Atleticos de Oakland y su modelo de reconstruccion ha sido imitado por muchos equipos de mercado pequeño. Un gran logro de un hombre que quiso cambiar las leyes del deporte. Como pelicula, es buena y hasta agradable. Pero por la trama ciento por ciento yanqui, quizas les parezca un tanto "na que ver con Chile" para muchos espectadores. O quizas al menos, no tanto...

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El beisbol es un deporte enraizado profundamente en USA. La Liga Profesional MLB gasta millones de dolares que en comparacion dejan a la NBA, la NFL y la NHL como parientes menores del deporte en ese lado del mundo.

En ese orden de cosas, Billy Beane (un creible Brad Pitt) gerente general de los Atleticos de Oakland ve como sus mejores jugadores emigran hacia los clubes con mejores recursos. Su planilla de menos de 40 millones no puede competir con las de mas de 140 millones como la de los Yankees. Colocado en un trance de reconstruir su equipo, opta por romper las reglas. Deja de lado a su red de cazatalentos, opta por escuchar a un analista de economia de Yale (un sorprendente Jonah Hill) y reemplaza intuicion por estadisticas. Contrata un puñado de jugadores echados de otros equipos y en decadencia para ver si, una vez más, puede conducir a sus Atleticos hasta el ultimo partido.

El filme transcurre bien principalmente porque impulsa al espectador a sentir simpatias por el personaje de Billy Beane. Porque Beane lucha no solo por su integridad o por la del deporte. Lucha contra toda una estructura que convierte a los equipos chicos en "donante de organos" para los poderosos y contra todos los intereses generados y que hay en medio del juego.

Brad Pitt y Jonah Hill cumplen con sus roles, llevando el peso de la pelicula. El principal defecto, sin embargo, no es precisamente un tema cinefilo. Al tratar el tema del besibol hace que un espectador 100% chileno le pierda un grado de interes. Es como si en Texas un camionero escuchara cuecas. Lo bueno, es que al ver el tema del dinero tan involucrado hoy en dia al deporte (en nuestro caso, el futbol) permite hacer una especie de paralelos con nuestra realidad.

Billy Beane sigue siendo hoy en dia Gerente General de los Atleticos de Oakland y su modelo de reconstruccion ha sido imitado por muchos equipos de mercado pequeño. Un gran logro de un hombre que quiso cambiar las leyes del deporte. Como pelicula, es buena y hasta agradable. Pero por la trama ciento por ciento yanqui, quizas les parezca un tanto "na que ver con Chile" para muchos espectadores. O quizas al menos, no tanto...

 

 

Estoy de acuerdo con el comentario de Blade Runner, la fui a ver al cine pero solo se explica su taquilla en USA por que el guion habla de un tema tipicamente gringo que es el beisbol, eso es como si un gringo fuese ver el documental de Bielsa y la clasificion a Sudafrica 2010, no le encontraria gracia a "chupete y la concha de tu herm...."

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