Hace unos diez días atrás tuve que ir de pasadita en la noche a 10/7 con Santa Rosa y vi un café nuevo en calle Emiliano Figueroa, donde se paran callejeras. Aunque no me tincó mucho, igual me pegué un kamikaze y entré.
Al ingresar, el local impresiona pero desfavorablemente, una casona vieja, media lúgubre, con recovecos. Se me acercan dos minas, mejor dicho dos veteranas, una negra de pelo teñido, malena canta el tango, que me sirvió una bebida por luka, y a la que despaché rápidamente. Luego se me acercó una chilena, de unos 50, esquelética, que parecía sacad del video de Thriller, y comenzó a pedirme un consumo de manera cargante, mientras me tocaba y me decía "¿Acaso no me encuentras linda?"; ante la insistencia, me empecé a urgir y fingí un llamado, prometiendo volver, y dejé una propina de quina para que no me huevearan.
Aquí va la tablita:
Datos Nombre del Café: Sin nombre, habría que crearle uno. (Propongo, Gárgolas) Dirección: Emiliano Fiqueroa Página Web: Es chiste, no? Valor consumo: $1.000 Cantidad de Niñas: 2 veteranas Turno: PM Notas Calidad de Niñas y Varios Mujeres: 1 (lo peor que he visto en mi vida) Actitud: 2 (sólo por el toqueteo) Servicio: 1 (una mierda) Lugar: 1 (era como la casa Usher) Música: No caché Consumo de la niña: Ni idea
Recomendable, sólo para kamikazes y vivir la experiencia.