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abes

EstoKador Santiago
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  1. Esta es mi tercera escort que veo y cumplió todas mis expectativas e incluso más. Datos generales: Nombre = Shina Edad = 37 años (aprox) Nacionalidad = Paraguaya Ubicación = Serrano con Tarapacá Lugar = Depto Conserje = Sí, pide carnet Fono = En el anuncio Horarios = En el anuncio Comunicación previa = Clara y directa Notas del servicio: Nivel de Empotamiento = Alto (No quedé pegado emocionalmente, pero sí volvería sin problema) Estatura = entre 1.55 y 1.60 aprox Contextura = Delgada Cara = Normal Nivel de Photoshop = Bajo (en vivo se ve más blanca) Piel / Olor = Muy buen olor, piel blanca y suave Trato: Muy relajada, cariñosa y sumisa y lo más importante de todo, calidez humana. Un amor de mujer, atenta en los detalles, ordenada y preocupada del ambiente. Cumple y se adapta muy bien al ritmo del encuentro. Besos = Muy buenos, intensos y naturales Mamada = Buena, dedicada Movimientos = Muy variados. Cuando tomó la iniciativa al montarme lo hizo muy bien. Calidad de sonido = Natural, sin exagerar ni fingir Ambiente = Limpio y ordenado Atención = Completa, dedicada y sin apuros Tiempo = Se cumplió completo (2 horas) Relación precio / calidad = Buena Promedio Final = Alto Comentarios finales: Shina es una mujer genuinamente sumisa, pero sabe tomar iniciativa cuando se le da espacio. Lee muy bien al cliente y hace que todo fluya de forma cómoda y natural. Ideal para quienes buscan una experiencia relajada, afectuosa y sin tensiones. Quedé muy conforme con el servicio y volvería sin problema.
  2. Reporte – Bella (experiencia personal) Datos generales: Nombre = Bella Edad = aprox 23-25 años Internet = LEK Costo = 60000 Nacionalidad = Chilena Ubicación = Serrano con Tarapaca Lugar = Depto Tipo = Atención individual Conserje = Si, hay que registrarse Fono = En el anuncio Horarios = En el anuncio Comunicación previa = Normal, sin mayor detalle (error mío). Notas del servicio: Estatura = aprox. 1.60 mts Contextura = Normal Cara = Mejor en fotos. En persona tiene una risa picarona/media diabla que a ratos intimida. Nivel de Photoshop = Medio (las fotos ayudan bastante). Piel = Suave, limpia, buen olor. Depilación = Sí. Ambiente = Depto limpio y ordenado. Trato: Acá empieza el problema. A mí me gustan las mujeres sumisas. Bella fue todo lo contrario: dominante nivel dominatrix. Desde el inicio llevó el control absoluto de la situación, sin mucho espacio para acomodarse ni conversar. Cero calidez, cero onda polola, cero intimidad. Más que relajada, estaba con ganas de dominar, y se notó todo el tiempo. Besos: Besos = 0 No hubo besos con lengua ni trato de polola. Servicio: Mamada = Normal tirando a básica, superficial, nada destacable. Montada = Técnica buena, se mueve bien, eso se reconoce, pero con actitud agresiva/dominante. Control = Siempre de ella. Yo más congelado que estatua. Frases incómodas = Varias, comentarios que sacan del momento y descolocan. Contacto físico = No le gusta que le tomen las manos ni el pelo en posiciones íntimas. Cuando intenté algo más suave, cortó al tiro. En resumen: Ella buscaba brutalidad. Yo buscaba intimidad. Choque total. Calidad de sonido: Muy bajo o casi nada. No exagera ni finge, pero suma al ambiente frío. Anal = No hubo. Empotamiento: Nivel de empotamiento = 10% No por lo rica, sino por la intensidad rara e incómoda del momento. Duración: Me fui antes de completar la hora. Salí frustrado y con sensación de haber pagado para pasarla mal. Post atención: Le escribí después por WhatsApp (sí, fui intenso, lo reconozco). Le dije que nunca me habían tratado tan mal. Me bloqueó de inmediato. Esperable. Relación precio/calidad: 30 / 100 60 lucas para salir frustrado no lo vale. Conclusión: No es una mala escort si te gusta que te dominen fuerte y te lleven al límite. Pero si buscas algo íntimo, sumiso o contenido, NO es tu opción. Volvería? Solo si quiero sentirme violentado simbólicamente otra vez. Así que no. Llegué y ella estaba con bikini negro. Nos saludamos con un beso en la cara. Entramos y lo primero que me dice es: “Aquí se paga primero”. Pago, me voy a duchar. Vuelvo y la quedo mirando, medio pasmado. Ella me dice: “No me vas a preguntar nada?” Yo: “No”. Primer error de novato. Nos vamos a la cama. Me siento y empieza con oral. Cuando me iba a poner el condón me dice: “No está duro aún!!” Eso me desconcierta, presión extra, se me baja un poco. Me saco el condón. Ella me miraba desafiante, y no sé por qué, pero daba miedo… en el momento intimidaba. Le digo que me toque. Me responde: “Viniste para que te lo toque no más?” Yo quedo en silencio. Ya estaba intimidado. Me lo toca unos 5 minutos, se me vuelve a parar, me pongo el condón bien esta vez. Ahí me empuja contra la cama y me dice: “Ya, quédate ahí.” Se me monta con furia. No voy a negar que se movía bien, pero era una montada agresiva. Mientras me montaba me dice: “Yo a ti te he visto, ¿cierto?” Pongo cara de confusión. Me insiste. Yo tratando de seguirle el ritmo, totalmente atontado. Después me dice que yo le había escrito antes. Le digo que sí, que había comentado algo de otra experiencia en el mismo depa (mi primera escort). Nada grave, pero parece que eso le activó algo. Al rato, mientras me montaba, me toma del cuello. Yo la dejo, pero me desconcierta y me asusta un poco. Cambiamos de posición a 4. La tomo de la cintura, ella se posiciona perfecto y la empiezo a penetrar. Ahí todo fluía mejor. Instintivamente quise tomarle el pelo y las manos. Se ríe y me dice: “Jajaja, querís tomarme las manos? Todos quieren eso. Tenís que pagar más si querís eso.” Yo sigo nomás, modo automático. Después pasamos a misionero. Yo empiezo sin levantarle las piernas y ella me dice: “Se hace así”, y se pone sola las piernas en mis hombros. Cuando estaba en lo mejor, me vuelve a ahorcar. La dejo, pero ahí sí me sentí violentado. Igual sigo, porque soy hombre y uno aguanta como puede. Cuando se calma, intento hacerlo como me gusta a mí: la abrazo, le acaricio el pelo, la penetro lento, profundo, la beso en el cuello. Ahí ella para todo, se sale y me dice muy molesta: “Eso me lo hace mi pareja, mi pololo. Tú no entiendes?” Eso me mata la erección al instante. Se me pone flácido fuerte. Ella dice que se acaba. Yo le digo que llevamos como 30 minutos, que pagué la hora completa. Intento de nuevo en misionero, pero me dice: “No, así flácido no.” Me salgo y digo ok, hasta aquí. Ella me dice: “Ya, vístete.” Le digo que quiero ducharme antes. Me voy a la ducha, vuelvo, me visto y me voy sin beso, solo un “chao”. Antes, cuando intenté tomarle las manos, me dijo que yo era violento. Yo le respondí que violenta era ella, porque me ahorcó sin permiso. Intenté mostrarle que solo quería tomarle las manos suave, pero ella insistía: “Viste? Eres violento.” En un momento incluso me dijo: “Si querís, me pongo bozal y me amarrái todo por 200 lucas.” Eso me descolocó completamente. Yo no quería eso para nada; si quisiera algo así sería con una sumisa, no con una dominatrix que me estaba dominando a mí. Me fui casi llorando de impotencia. Después por WhatsApp le dije cosas duras desde el dolor, que nunca me habían tratado tan mal. Me bloqueó al tiro. Hoy lo veo en retrospectiva y me río de lo novato, pero en el momento fue duro. Me sentí pasado a llevar, intimidado y completamente fuera de mi zona. Conclusión personal: no es para mí, no volvería ni cagando, salvo que quiera ser violado de nuevo (broma… pero no tanto). Historia dura y cruda. Novato total. Aprendizaje caro.
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