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Tzar

Daniela de Masajes Bliss

Mensajes recomendados

Centro Masajes : Bliss
Ubicación : San Antonio con Monjitas (Galería Bahia)
Valor : $20.000 + $5.000 de propina
Horario : 17:00 hrs.
Fono : +56953545358
Recepción : Normal
Higiene : Toalla, baño y box limpios

Terapeuta o Masajista
Masajista : Daniela de Venezuela
Contextura : delgada con buenas curvas, me comento que tiene 37 años pero la verdad su anatomía refleja unos 25 años (cintura exquisita, hermosos glúteos, bellos cuerpos mamarios y lindo rostro)
Trato : Excelente
Cara : Linda
Besos : No hubo por pandemia y se entiende
Masaje : Excelente, tiene gran habilidad con las manos
Sensitivo : Una maravilla

Relato:
Día viernes recién pasado y me dirijo al centro de Santiago, me comunico con el centro de masajes, saludo al conserje, me devuelve saludo y me dirijo al ascensor. La verdad es que hace mucho tiempo que no regresaba al Bliss y me agrado mucho la calidad de las niñas, se presentan Daniela, Melissa y Taty (todas muy bellas). Decido por Daniela y me trae toalla y chalas para el respectivo baño.
Luego me tiendo en la camilla y entra ella despojándose de su corto y ceñido vestido que adornaba tan bella anatomía. Posteriormente se quita el sostén y comienza el masaje de gran calidad muy preocupada por cada lugar del cuerpo con una fuerte presión y dedicación, mientras conversamos gratamente me consulta por el servicio al que venía y le comento que por el masaje simple a lo cual me percato que no hubo ningún cambio en la atención y la dedicación no cambia (SE AGRADECE GRANDEMENTE ESTA ACTITUD YA QUE MUCHOS CENTROS TIENEN LA PRACTICA DE DISMINUIR LA CALIDAD DE LA ATENCIÓN SI NO SE ACCEDE AL MASAJE FULL).
Luego veo volar su diminuto calzón y me indica que me de vuelta. Ella sube a la camilla y dedica masaje en la parte frontal del cuerpo masajeando con sus hermosos pechos mi ser mientras yo acaricio sus bellas formas anatómicas, su suave y exquisita piel canela uff una delicia hasta ese momento.
Me hace bajar de la camilla y me pregunta si quiero una chupadita y le exclamo “pero por supuesto° a lo cual ella me responde que la respuesta es “pero quien no° jajajja.
Retira profiláctico del envoltorio y procede a colocar el traje al compañero de andanzas que ha ese momento estaba atonito por la gran belleza frente a el, se arrodilla y procede a realizar caricias de gran calidad con su boca yo cierro mis ojos inclino la cabeza y respiro profundamente disfrutando interna y profundamente ese gran momento abro mis ojos , comienzo a acariciar su espalda, cabeza y quito su amarra del cabello para verle su rostro con pelo suelto y aprecio la gran sensualidad de su pelo cayendo bajo sus hombros.
Ya extasiado con su belleza me apoyo de pie en la camilla y ella coloca mi pene en la división glútea y comienza a moverse mientras quedan a mi disposición esas bellas masas redondeadas que se adornaban con mi miembro viril con vista al cielo mientras ella danzaba sus glúteos masajeaban con cada movimiento los testículos (que cosa más rica, le comenté de su gran técnica para masajear los testículos y es que la verdad sentir el roce de sus glúteos con mis testículos fue una maravilla).
Por si fuera poco, ella aún de espalda a mi toma mi miembro y lo introduce bajo sus dos glúteos quedando este en constante roce con su vulva simulando penetraciones para que les cuento del movimiento de ella mientras yo acariciaba y recorría su piel con besos, manos y la mirada. Una delicia digna de ser comparada con un pequeño niño en una dulcería.
Luego frente a frente la besé por el cuello recorrí sus firmes glúteos y le comenté de la bella anatomía de la cual es dueña a lo cual me comenta que tiene 37 primaveras las cuales no son notorias por la calidad de anatomía que eran testigo mis ojos. Ya cerca de la hora tocan la puerta señal de que el tiempo estaba cumplido. Le doy las gracias y bendiciones por tal dedicación hacia mi ser.
Luego me despido nuevamente agradecido grandemente por haber tenido la oportunidad de haber disfrutado de tal encanto de mujer.
Volveré pronto…

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A lo mejor sí es por la pandemia, a lo mejor no.

Lo que sí puedo decir es que las (pocas) masajistas que conocía antes que me he vuelto a atender tras empezar la pandemia sí me han comido a besos, y he conocido otras nuevas que también lo han hecho, y eso que yo soy más feo que la chucha.

A lo mejor simplemente no les nace hacerlo (como las masajistas que antes de pandemia por ahí tampoco me los daban, poquitas, pero las hubieron), o cobran extra por ello o qué sé yo. Pero si fuera por "pandemia" ni siquiera deberían atender xD. En fin, cada quien tendrá sus razones.

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