Bien.
Estoy cumpliendo una promesa, de las tantas que hice, cuando me encontraba en momentos difíciles.
Todo partió por la curiosidad que creó una conversación de unos compañeros de universidad sobre scorts.
Busqué muchas páginas y caí en esta. Me impresionaron muchas fotos como ha muchos de uds.
Busqué a las más lindas y entre ellas la que más me gustó y tomándolo muy a la ligera anoté su número de celular y lo guardé pensando en no utilizarlo nunca.
Así pasó que un día después de ver un partido y con mucho alcohol en el cuerpo tuve la idea de llamar.
Contacto, dirección y adios. Ya no recuerdo casi nada.
Tuve la precaución de pasar a comprar condondes extra protección por mi propia seguridad.
Al otro día, a pesar de no estar muy arrepentido, me preocupé un poco porque hubo una ocasión en que la scort tuvo que recordarme utilizar otro condón (Estaba sin nada). No me acordaba si habíamos tenido sexo sin condón aunque fuese por poco tiempo.
No dejaba de pensar en eso. ¿Y si estaba enfermo? Si tenía Vih toda mi vida se perdería por una noche de estupidez. Y el no saberlo con certeza me volvía loco. Había que esperar 3 meses para obtener los primeros resultados confiables y un poco más ya para obtener los definitivos.
Leí muchas cosas sobre el vih en ese tiempo. Muchos testimonios. Me enteré de la real tragedia que era ser ceropositivo.
Cada triunfo en la vida se hacía insignificante porque estaba condicionado a si tenía el virus o no.
Un día, en un partido de futbol, mi corazón se aceleró como nunca y no pude respirar por unos segundos. Quedé con la piel fría. Era posible que eso quizá era causa del virus...
Mi vida entera, años de estudios, el futuro, tanto en juego por una estupidez.
Pero ya estaba hecho. Todo estaba en las manos de Dios.
Cada día que pasaba le pedía con todo mi corazón que no tuviese el virus y fuese libre. Dormía muy mal y no podía dejar de pensar que solo descansaría al tener los resultados en mis manos. De ahí sería un nuevo comienzo.
Y así pasaron algo más de 4 meses y me hize el exámen.
La doctora me aconsejó hacerme varios examenes más de enfermedades ETS.
El resultado estuvó en mis manos y sólo quería terminar con eso de una vez por todas. Si era positivo tendría que replantearme toda mi vida y encontrar fuerzas para continuar de donde no las tenía. Y si era negativo sería el hombre más feliz del mundo aunque fuese por unos instantes.
Me dirigí hacia unas bancas donde había mucha más gente y abrí el sobre. Ahí andentró leí el resultado negativo de todos los exámenes y dí un gran suspiro. Todo empezaba de nuevo y todos mis pequeños triunfos adquirían valor. Sería otro. Ya no volvería a hacer esas cosas y poner en juego una vida entera.
Esa es mi historia y fue una de las cosas que prometí que haría si salía ileso de esa experiencia.
Sólo quiero generar conciencia de lo que está en juego. Tuve la suerte de que la chica que me tocó fue muy cuidadosa y resguardaba también mucho su salud. Le dije que tenía 21 años y me miró con una cara de trizteza porque ella tenía la misma edad y no los 19 que me había dicho en un principio.
Estokadores, la decisión es personal. Sólo quiero decirles q cuiden su salud cualquiera sea la elección.